lunes, 1 de abril de 2013

Lee, que algo queda



La canción correcta
Para alguien que le gusta mucho la música, del mismo modo que cada canción trae a la memoria un recuerdo, cada instante de la vida trae a la mente una canción. Una canción que se convierte en la banda sonora de esa escena de la vida. La letra, la música, el compás, el espíritu y las notas se convierten en el telón de fondo de cada episodio que le toca vivir. De pronto entonces, empieza a silbar o tararear, sin que los demás se den cuenta o se pregunten de dónde salió esa canción. Pero en los momentos tranquillos, o en los momentos en que los pensamientos se agolpan, no es fácil pensar en la canción apropiada. Pueden ser muchas las canciones que se vengan a la mente, o puede ser que ninguna se adapte tan perfectamente como quisiera a ese momento en especial. Es en ese instante cuando, para romper la tranquilidad del momento, enciende en reproductor y deja que la máquina, en modo de reproducción aleatoria, tome la decisión. Es allí cuando ocurre el milagro. La magia aparece y entre los miles de canciones que tiene almacenadas, el reproductor se convierte en mensajero de extrañas dimensiones astrales y elige, entre toda las canciones, la canción correcta.


Una historia normal
Esta es una historia que no tiene nada de especial. No es una de esas historias de superación y sacrificio, que sirven a otras personas para para mejorar su vida. No tiene un inicio humilde como tantas otras. Tampoco tiene una trama extraordinaria, donde se conjugan hechos increíbles con casualidades propias de lo real maravilloso, que esas se han convertido en ases sacados tramposamente de la manga a la hora de escribir una historia. Esta historia es muy normal, sobre personajes que viven su vida sin sobresaltos. Sus sueños son sueños comunes, nada fuera de lo común, como se espera de la gente normal. No hay un cambio inesperado en el transcurrir tranquilo de sus vidas. Tal vez muchos consideren esta historia monótona, pues en ella no pasa nada extraordinario. Y el final, apenas podemos decir que es un final, pues todo queda igual que antes, sin cambio alguno en la existencia. Como dije antes, es una historia normal ¿Aún quieren que cuente esta historia?

1 comentario:

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...