Paseando por internet no encuentro nada que valga la pena como punto de partida para un blog, mi vida últimamente carece de episodios blogueables. No es que sea aburrida, sino que más bien los temas no van del todo con el espíritu del blog, o son lo suficientemente personales como para que alguien se sienta aludido y me borre de su lista de amigos, me prohíba la entrada a su Facebook o cualquiera de esas cosas que hace la gente ahora cuando no te quiere ver.
Tal vez me queda el recurso de buscar algún conjuro para hacer que aparezca la musa. A propósito ¿Cuál es la musa de la escritura sin sentido? Cualquiera que sea, se ha ido a animar a otros más tontos que yo.
Reviso los borradores que tengo. Nada listo como para publicar. Reviso otros blogs en busca de una idea que pueda revisitar a mi propio estilo. Nada. Busco en la noticias algo que me sirva de punto de partida para un post. Tampoco. ¿Alguna anécdota reciente, una canción, película o evento para dar mi opinión o ilustrar una enseñanza? Nada.
Reviso los borradores que tengo. Nada listo como para publicar. Reviso otros blogs en busca de una idea que pueda revisitar a mi propio estilo. Nada. Busco en la noticias algo que me sirva de punto de partida para un post. Tampoco. ¿Alguna anécdota reciente, una canción, película o evento para dar mi opinión o ilustrar una enseñanza? Nada.
Tonto consuelo me sirve saber que muchos escritores mejores que yo han pasado por esta famosa etapa del “bloqueo”. Yo he pasado por el bloqueo, el blanqueo y hasta el cuelgue, sin más beneficio que el mejorar notablemente mis habilidades para el solitario de Windows.
Al final, el miedo mayor de los blogueros se hace realidad. Estoy escribiendo sobre mi falta de temas para postear.
Recuerdo que en mi cuarto post (hace un millon de años) escribí "ya no se qué escribir" y justamente puse la canción que da título a tu blog. Curiosa coincidencia.
ResponderBorrarEsto del bloqueo pasa, me imagino, a todos, y si va, igual como llegó. Sin hacer ruido.
See ya!