Por Dios, que falta de imaginación para hacer un regalo, y que poca tolerancia.
Sucedió el sábado pasado, en vísperas del Día de Mamá, en el centro comercial, en la sección de chocolates, donde la gente haciendo un pequeño tumulto se acaparaban y arrebataban las últimas cajas del muy buscado producto. Mientras esperaba pacientemente a que los emotivos y bien intencionados compradores, se decidieran por el dulce regalo para sus mamis, me puse a recordar en voz alta aquella lectura que hice sobre las investigaciones de la Escuela de Medicina y Farmacología de la University of Western Australia, donde decía que las mujeres adultas mayores que consumen chocolate tienen huesos más débiles y delgados. “El estudio relaciona el consumo de chocolate y la poca calidad de la estructura ósea, aumentando el riesgo de osteoporosis y fracturas", decía yo mientras algunos voltearon con una sonrisa amable.
Continué muy seguro de lo que leí, diciendo que los investigadores añadían que el chocolate contiene oxalato que inhibe la absorción del calcio, que eleva la eliminación del calcio (noté cierta sonrisa de escepticismo e incomodidad en los compradores), “las mujeres que comen chocolate tienen una densidad ósea de un 3,1 % menor, en promedio; así también huesos más débiles en el talón, la tibia o el mentón”, recordé ante la atención de los compradores.
Y bueno, por una cuestión de elegancia no me quedaba más remedio que esperar mi turno para tomar una caja, así que seguí con mi monólogo y recordé diciendo que “otra investigación publicada en la revista médica británica The Lancet señalaba que los beneficios del cacao en la función vascular, se pierden durante el proceso de elaboración del chocolate ya que las flavonoides pigmentos vegetales beneficiosos, son extraídas y, con ella, los beneficios del chocolate”. Algunas miradas agresivas apuñaban mi imagen. Con la seguridad de un erudito en la materia, recordé además que el chocolate (no el cacao) no es recomendable pues eleva los niveles de colesterol y triglicéridos, por los contenidos que azúcar y grasas, y no sé qué tantos otros prejuicios del chocolate sobre todos a las mujeres adultas mayores; ¡y ademásssss! sobre la estimulación del chocolate sobre la libido sexual en las mujeres.
Por último, ante la atención de todos, me convencí, siempre en voz alta, que no era una “notable idea” regalarle chocolates a mamá, y me retiré de la sección aprovechando que algunos compradores comenzaban a rodearme con cara de pocos amigos. Intolerantes.
… oops, ¿alguno regaló chocolates?
PD. Este es un "cortipegado" de un mail que me mandó un amigo mío, pero que parece que lo hubiera escrito yo mismo, así que lo pongo aquí en mi blog. Si mi amigo llega a leer esto, disculpa, cuñao, por no haberte pedido permiso.
Mi abuela es de creer mucho en esas investigaciones que salen en los diarios, yo no... hasta que no me lo demuestren a mí, no lo creo... Además si el chocolate te hace mal, igual lo comes! Porque es CHOCOLATE! Lindo blog, buen hallazgo...
ResponderBorrarLeyéndote me han venido a la mente algunas películas con el tema del chocolate: "Fresa y chocolate", "Como agua para chocolate", "Un poco de chocolate", "Chocolate", "Charlie y la fábrica de chocolate"...
ResponderBorrar¿Qué será lo que tiene el chocolate que lo hace tan seductor?
El chocolate como tema da para mucho, no solo para hablar de películas. En la literatura tenemos desde "Como agua para Chocolate", que según opinión general, es mucho mejor que la película, hasta "Chocolate caliente para el alma" (el otro extremo de la calidad literaria). A mi el que más me gusta es la mención que hace García Marquez en "Cien años de Soledad", donde cuenta la historia del Padre Antonio Isabel, que hacía el milagro de la levitación inducido por una taza de chocolate caliente.
ResponderBorrarmi papa trabaja en la colina ....jejejje
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