Buscando algo bonito y esclarecedor que
escribir para el día de San Valentín, rebusqué entre mis papeles y mis cosas
algún verso o texto perdido que pudiera reciclar, o por lo menos me sirviera de
puntapié inicial para escribir ese post que me merezca la posteridad entre la
cantidad de tonterías que aparecen en internet con motivo de estas fechas. Ya
que a mí no se me da lo cursi ni lo poeta, decido mantenerme en mi especialidad
que es la tontura con clase, como la calificó una de las seguidoras de este
blog en afortunada frase. El problema es que la musa que era mi casera anda
coqueteando con otros tontos, según parece, porque por aquí ya no aparece ni de
casualidad.
Antes de que se me caliente la hiel y decida
traer a la mencionada musa de las orejas para que aprenda a no tenerme
abandonado, reviso, como decía anteriormente, mis papeles anteriores donde
colecciono los retazos de historias que me ocurren a ver si queda algo
rescatable. Como siempre, no encuentro nada ni siquiera para un tweet, no
digamos para un post completo. Revisando entre las interminables páginas de
internet tampoco encuentro algo que me saque de la convicción de que en la red
andan demasiados que se quieren parecer a Arjona o a Paulo Coelho, y casi
ninguno que quiera parecerse a Becquer, o por lo menos a Sabina.
Decido entonces armar un post con retazos de
frases que tengan por tema el amor, de esos que andan sueltos por el twitter
como perro por su casa, y que terminan la mayoría de las veces con un “Tú sabes
a quién me refiero”. Esta es una frase que debe usarse con cuidado, porque la
primera y única vez que la usé tuve que desgastarme aclarando a quién iba
dirigida la mención: No, tú no eres; Tú tampoco, que a ti ya te olvidé; Tú
menos, cómo se te ocurre; A ti es que te digo; No, a ti no; Tú, a ti te digo,
no te hagas la tonta, etc.
En fin, mi intención era pedir a distintas
personalidades una frase alusiva a estas fechas amorosas para publicar. Pero
como esas personalidades ya me conocen, creían que la cosa iba de chiste y me
dejaron frases bastante tontas. Con todo, decido publicarlas hoy, porque sé que
estas frases vienen del corazón, y a fin de cuentas, el amor nos vuelve tontos
a todos y cuando uno está enamorado se cree que cualquier tontería es poesía,
más o menos como cuando le dedica a su enamorada una bachata. Pongo aquí
entonces las frases famosas antes de que regrese la musa y me interponga una
demanda por escribir sin su permiso:
Pienso en ti, luego existes. (Descartes)
- Sin embargo ¡Cómo te mueves, morena! (Galileo)
- Que sueñes conmigo. (Freddy Krueger)
- Si no existieras, tendría que armarte. (Frankenstein)
- Hoy te ves muy mona. (Darwin)
- Qué ganas de llegar a tu corazón. (Drácula)
- Eres el amor de mi tercera vida (Un gato)
- Ay, que me vas a hacer perder la cabeza por ti. (Maria Antonieta)
- Tú sabes que eres la única mujer para mí (Adán)
- Te juro, mi amor, que los enanos eran solo amigos. (Blancanieves)
- Me gusta cada pedazo de ti. (Jack el Destripador)
- Mi vida, tú sí que tienes un físico impresionante (Einstein)
- ¿Que te traiga la luna dices? Está bien, haré el intento. (Neil Armstrong)
Ya que dicen que el amor vuelve tonto al más sabio, que tengan un tonto y feliz día de San Valentín.
Muy buena entrada, bastante entretenida,
ResponderBorrary si el amor nos hace mas tontos y con cualquier ridiculez caemos sin resistencia alguna.
Las frases del final están geniales!
me copio unas para el facebook (:
un abrazo!